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Las elecciones europeas siempre han sido un termómetro de la política en el continente, pero las más recientes han tenido implicaciones más profundas debido a las tensiones geopolíticas y económicas actuales, pero también debido al gran auge que han experimentado las criptomonedas desde las últimas elecciones, en mayo de 2019.
En una entrevista del programa Myconomy, Javier Pastor, director de comunicación del crypto exchange Bit2Me, reflexionaba acerca del futuro del euro, el dólar y de Bitcoin (BTC) tras estas votaciones europeas.
El contexto de las elecciones europeas
Las elecciones europeas recientes han sacudido la estabilidad del euro. Según Javier Pastor, «hay una pérdida de confianza tremenda en las instituciones», que se ha reflejado tanto en la baja participación, sobre todo en España, como en las corrientes ideológicas que han protagonizado los resultados. En efecto, estas elecciones han contado con una participación mas baja de lo habitual: la tasa de participación de las elecciones europeas en España ha alcanzado el 49,2%, es decir, no ha llegado a la mayoría.
Así, señala el fortalecimiento de nuevos partidos políticos en estas elecciones. Esto ha sido una sorpresa en países como Francia y Bélgica, donde los votantes han buscado soluciones que tienden más a los extremos del espectro político. Para Javier Pastor, esta tendencia hacia los populismos podría llevar a una mayor inestabilidad en nuestro continente, afectando negativamente al euro, pero impulsando a Bitcoin como solución:
Vemos que la población busca soluciones más a la extrema izquierda, más a la extrema derecha en este caso, y que el auge de los populismos pues es algo que vamos a vivir en los próximos meses. Entonces yo creo […] que Bitcoin ahí juega un papel clave en esta transición de degradación de la confianza, y eso va a afectar inevitablemente a la moneda a medio plazo, y la posibilidad que tenemos de protegernos en un activo no dependiente de todos estos actores tradicionales.
Bitcoin y su papel en el escenario económico
Pastor hace mucho énfasis en que la disminución de la confianza en el euro y el dólar es el factor clave para acelerar la adopción de Bitcoin. «Creo que todo se está alineando para que Bitcoin entre otras cosas también desde el punto de vista político y por intención de voto sea una alternativa», afirma. La volatilidad y la naturaleza finita de Bitcoin lo convierten en una opción atractiva para aquellos que buscan una diversificación inversora para mitigar los riesgos asociados con el control detrás de las divisas.
Desde la perspectiva de Javier Pastor, la transición hacia el uso generalizado de Bitcoin será un proceso prolongado, sobre todo por el interés de EE.UU. por mantener al dólar como dominante en los mercados internacionales de materias primas. En sus palabras, «vamos a vivir, pues, 10, 15, 20 años de transición. O sea, esto no va a ser de la noche a la mañana, y espero que no sea de la noche a la mañana porque sería dramático». Además, sugiere incluso la posibilidad de una nueva moneda respaldada por países como los BRICS, que podría erosionar los intereses monetarios de Europa y Estados Unidos.
En cuanto al crecimiento de Bitcoin como alternativa monetaria, Pastor observa un aumento en el interés y la adopción de Bitcoin en sectores diversos. En relación al sector público, cita por ejemplo el famoso caso de El Salvador, pero también las recientes declaraciones de Donald Trump como «crypto presidente», o la figura de Javier Milei y su discurso pro-crypto y pro-mercados en Estados Unidos. Sobre el sector privado, resalta los pasos más recientes que ha dado Bit2Me para la integración de las cryptos en la economía real, como su colaboración con un concesionario de Mercedes-Benz, o su asociación con Mastercard para facilitar el uso de Bitcoin.