Colapsa un importante fondo de criptomonedas por el derrumbe de FTX

Galois Capital, un importante fondo de cobertura, se ha visto obligado a cesar todas sus operaciones, informa el Financial Times. Esto se produce después de que gran parte de su capital quedara inmovilizado en el colapsado FTX. El fondo, que invertía principalmente en criptomonedas, distribuirá el 90% de su capital restante entre sus clientes. El 11 de noviembre, el fondo ya anunció que tenía una gran parte de capital inmovilizado en FTX; $50 millones para ser exactos.

¿Ethereum en $10.000 y una altseason cerca? Esto es lo que dicen los crypto expertos

Noticias

29/06/2025

FTX golpea a las criptomonedas

En los últimos meses, Galois Capital ha intentado sacar lo mejor de la situación, pero no se ha recuperado del golpe. Kevin Zhou, cofundador del fondo, pide disculpas a los clientes. También dice que la extremidad de los acontecimientos hace imposible continuar.

Zhou planea vender los créditos de la empresa en lugar de esperar a un proceso de quiebra. De hecho, estos procesos pueden durar años. Galois Capital es una de las muchas partes que tenían grandes sumas de capital en FTX.

El hombre que estaba detrás de FTX y responsable último de la debacle, el ex consejero delegado Sam Bankman-Fried (SBF), será juzgado por sus acciones en octubre de este año. Actualmente, se encuentra en libertad bajo fianza y en casa de sus padres en California.

Sam Bankman-Fried vuelve a portarse mal

Por ahora, SBF se mantiene bajo su presunción de inocencia. Supuestamente, no sabía nada del amaño del capital de los clientes. Los fiscales del juicio lo ponen en duda y preparan ocho acusaciones oficiales. SBF es presuntamente culpable de fraude, entre otras cosas.

Recientemente, SBF ha vuelto a comportarse mal. En concreto, se puso en contacto con posibles testigos del próximo juicio. El juez que instruye su caso le intervino, prohibiéndole el uso de servicios de mensajería.

La semana pasada, SBF pareció volver a portarse mal. Utilizó una VPN dos veces en pocos días para enmascarar su uso de Internet. Esto suscitó muchas dudas en la fiscalía. El juez consideró la posibilidad de prohibir a totalmente la conexión a internet a SBF, pero renunció a ello. Sin embargo, un investigador se puso a investigar la función con la que SBF usaba internet.