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El Bitcoin y el S&P 500 luchan por abrirse paso definitivamente, pero todos los ingredientes para un mercado alcista siguen en su sitio. El mercado laboral sigue siendo sólido, con un desempleo históricamente bajo y las condiciones óptimas para un consumidor fuerte. Sin embargo, sigue sin lograr un avance definitivo. ¿Cómo es posible?
Un mercado laboral fuerte apoya al mercado financiero
Empecemos echando un rápido vistazo al mercado laboral estadounidense. Es crucial para el bitcoin y la renta variable que se mantenga intacto, ya que es poco probable que un mercado laboral débil y una carrera alcista vayan de la mano.
Cuando el desempleo se dispara, el consumo naturalmente cae y eso va en detrimento del crecimiento económico y de los precios de los mercados financieros. Actualmente, sin embargo, el desempleo sigue siendo extremadamente bajo. Con todo el miedo que rodea la guerra comercial de Trump, se podría esperar algo diferente, pero por ahora es sobre todo miedo.
Los datos económicos reales siguen siendo sólidos. Al mismo tiempo, la semana pasada conocimos buenas cifras del mercado laboral. El número de ofertas de empleo aumentó. Y lo que es más importante, el crecimiento salarial fue superior a la inflación. Como resultado, la confianza de los consumidores sigue siendo fuerte.

Además, la tasa de desempleo sigue en el 4,2%, muy por debajo del 5%. Básicamente, la «regla» es que todo lo que esté por debajo del 5% indica un mercado laboral fuerte. Con ello, la economía estadounidense sigue «preparada» para una carrera alcista.
El impulso es positivo
Al mismo tiempo, vemos que el mercado financiero también está recuperando impulso. Así, ha llegado una señal fuerte para el S&P 500, y una «nube» clave de medias móviles ha pasado a una formación alcista .

En este caso, está en la media exponencial de 21 días, 55 días, 100 días y 200 días del precio. Hablamos de una formación alcista si van de mayor a menor en el orden indicado anteriormente. Si las medias exponenciales más cortas son superiores a las más largas, la tendencia a corto plazo suele ser positiva. Y los resultados de las últimas 9 veces que hemos visto esta señal desde 2009 hablan por sí solos.

Cada vez hay más indicios de reanudación de la carrera alcista. Lo mismo cabe decir de los ruidos procedentes del ámbito político en Estados Unidos. Allí, la máquina del dinero parece ponerse cada vez más en marcha para ganar a China la carrera armamentística de la inteligencia artificial. Todo esto también es positivo para el tipo de cambio del bitcoin. Al mismo tiempo, no debemos olvidar que la guerra comercial todavía podría echar un cable, y que el aumento de los rendimientos de los bonos del Estado a largo plazo es una tendencia a tener en cuenta.
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