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Las turbulencias en los mercados financieros van en aumento. Empresas tecnológicas como Nvidia han iniciado recientemente una caída libre, las tensiones geopolíticas mundiales van en aumento y Bitcoin tampoco logra recuperar del todo su impulso alcista.
¿Qué está pasando y qué podemos esperar del precio de Bitcoin?
Turbulencias macroeconómicas y geopolíticas
En Estados Unidos, hemos asistido a un aumento de la inflación en los tres primeros meses de 2024, debido al buen comportamiento de la economía estadounidense. Esto dificulta (o más bien imposibilita) que la Reserva Federal recorte los tipos de interés estadounidenses.
Con ello llegan los conflictos Israel/Irán, Rusia/Ucrania y China/Taiwán. Teóricamente, eso también hace subir los precios del petróleo, lo que a su vez presiona al alza la inflación.
En cualquier caso, está claro que el mercado alcista se encuentra actualmente en pausa. Por si fuera poco, los investigadores del banco central estadounidense afirman que es necesaria una «profunda recesión» para que la inflación vuelva al deseado 2,0%.
Cleveland Fed researchers analyze the FOMC’s most recent economic projections. Their model projects the FOMC’s unemployment rate path brings core PCE inflation to 2.75% by 2025
«A deep recession would be necessary to achieve» the 2.1% inflation projection https://t.co/EsstjT0oQ9 pic.twitter.com/3HA5fbkVNj
— Nick Timiraos (@NickTimiraos) February 21, 2023
En estos momentos hay incertidumbre en todos los ámbitos, lo que nos dificulta a los inversores decidir una estrategia a corto plazo.
¿Qué significa esto para el precio de Bitcoin?
A corto plazo, estos acontecimientos no son necesariamente positivos para el precio de Bitcoin. Si la inflación sigue siendo un problema y los recortes de los tipos de interés tardan más en materializarse, el precio de Bitcoin se verá presionado a la baja en un futuro próximo.
Por otro lado, el retraso de los recortes de los tipos de interés por parte del banco central estadounidense está volviendo a aumentar la presión sobre la montaña de deuda del gobierno estadounidense. Así que ahí, las impresoras de dinero pueden tener que encenderse de nuevo para empujar esos males aún más lejos.
Así pues, la ausencia de recortes de los tipos de interés a un plazo algo más largo parece de nuevo alcista.
Lo mismo ocurre extrañamente con la recesión y otras formas de escalada global. Los grandes problemas suelen resolverse con la impresora de dinero, lo que en teoría siempre parece positivo para Bitcoin.
Dicho esto, por supuesto, una recesión mundial u otra miseria a corto plazo (y en absoluto) es cualquier cosa menos deseable.