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BlackRock, el mayor gestor de activos del mundo, está experimentando un crecimiento explosivo en la entrada de capital hacia sus fondos relacionados con criptomonedas. Mientras la entrada total de dinero en el segundo trimestre de 2025 cayó debido a la salida de un gran cliente institucional, la división cripto mostró un impresionante aumento del 370 %. Esto confirma que la expansión de las criptomonedas en las finanzas tradicionales sigue avanzando sin freno.
La cripto se convierte en motor de crecimiento en BlackRock
En el segundo trimestre, entraron 14.000 millones de dólares (12.000 millones de euros) en los fondos cripto de BlackRock, los iShares crypto ETFs. Un salto notable respecto a los 3.000 millones de dólares (2.500 millones de euros) del primer trimestre.
Esto significa que los activos digitales ya representan un 16,5 % de toda la entrada de capital en ETFs de BlackRock. A modo de comparación, en el primer trimestre apenas suponían el 3 %.
Esto sucede a pesar de que la entrada total de capital en BlackRock cayó un 19 % debido a una salida puntual de 52.000 millones de dólares (44.000 millones de euros) por parte de un cliente institucional.
El interés por el iShares Bitcoin Trust ETF (IBIT) ha sido clave. Este ETF rompió récords en junio al superar la marca de 10.000 millones de dólares (8.500 millones de euros) en activos gestionados en solo 341 días desde su lanzamiento.
Según analistas, esto demuestra que los inversores institucionales están entrando en masa, algo que durante años se consideró solo una posibilidad remota, pero que ahora se está convirtiendo en realidad.
Cripto todavía aporta poco, pero su potencial crece
Actualmente, los activos digitales representan apenas el 1 % de los ingresos a largo plazo de BlackRock, pero este porcentaje está aumentando rápidamente. En comparación con el trimestre anterior, los ingresos de la división cripto crecieron un 18 %.
El CEO Larry Fink destacó durante la presentación de resultados que BlackRock, con sus ETFs cripto y su nueva alianza en India, está apuntando a una generación joven y global de inversores.
El sentimiento en el mercado cripto parece respaldar esta tendencia. El precio de Bitcoin subió un 25 % en el segundo trimestre, frente a una caída del 12 % en el primero.
Los datos de BlackRock confirman lo que muchos sospechaban: las criptomonedas ya no son un nicho para inversores tecnológicos, sino que se están consolidando como un activo serio para las instituciones financieras. Y con una entrada de capital cada vez mayor, la adopción institucional de cripto apenas está comenzando.