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Los rendimientos de la deuda pública estadounidense a 30 años se dirigen hacia el 5%, tras tocar el nivel del 5,15% justo la semana pasada. Los inversores tienen cada vez menos interés en los bonos del Estado a largo plazo. Y eso podría tener enormes efectos en el precio del bitcoin.
Aumenta la tensión en el mercado de bonos
Aumentan las tensiones en el mercado de bonos estadounidense. Una encuesta publicada el miércoles por el banco de inversión JPMorgan muestra que los inversores se están cubriendo cada vez más contra la caída de los precios de los bonos. Las denominadas posiciones cortas directas, que apuestan por una caída del valor de la deuda pública estadounidense, alcanzaron el nivel más alto desde mediados de febrero. Esto afectaba a un amplio abanico de participantes en el mercado, incluidos bancos centrales, fondos soberanos e inversores institucionales.
La preocupación no es nueva. Estados Unidos perdió recientemente su última calificación crediticia de «triple A», mientras que la Cámara de Representantes acordó un paquete de gasto masivo que aumentará aún más su ya casi $37 billones de dólares de deuda nacional. Al mismo tiempo, se está produciendo en todo el mundo una fuerte oleada de ventas de bonos a largo plazo, como los japoneses.
Según Leah Traub, gestora de carteras de la gestora de activos Lord Abbett, existe un patrón global: «La curva de rendimientos se está empinando en todas partes. Los detalles difieren de un país a otro, pero la historia subyacente es la misma: la demanda de bonos del Estado a largo plazo está cayendo, mientras que la oferta está creciendo. Eso ejerce presión sobre el extremo largo de las curvas de rendimiento».
La subida de los tipos de interés de los préstamos a largo plazo, combinada con el aumento de la deuda soberana y la caída de la calificación crediticia, hace que a los gobiernos les resulte cada vez más caro financiarse. Esto también puede tener consecuencias económicas a largo plazo, por ejemplo para la inversión o el mercado inmobiliario, donde los tipos de interés a largo plazo suelen servir de referencia.
Los tipos de interés altos deprimen la economía
El aumento de los tipos de interés a largo plazo no sólo dificulta la refinanciación de la deuda pública. También ha hecho subir los tipos hipotecarios por encima del 7%. Al mismo tiempo, las empresas y los consumidores tienen que pagar tipos de interés más altos por sus préstamos. En conjunto, esto crea una situación en la que la economía se ve sometida a presión, y eso no es bueno para los mercados de renta variable ni para el bitcoin.
El bitcoin necesita una economía fuerte para prosperar, y esa idea se ve ahora presionada por el aumento del rendimiento de los bonos.
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