Foto: Diego Thomazini/Shutterstock
El Banco Central Checo (ČNB) ha dado un sorprendente primer paso en el mundo de las criptomonedas. En lugar de comprar bitcoin directamente, el banco invirtió más de $18 millones de dólares en acciones de Coinbase. Esta importante plataforma de criptomonedas estadounidense facturó cerca de $6.600 millones de dólares en 2024.
Con este movimiento, el banco central se está posicionando de forma prudente pero decidida hacia la emergente economía digital. La compra forma parte de una estrategia más amplia: la exposición a sectores innovadores a través de empresas consolidadas del S&P 500.
¿Movimiento inteligente o ensayo prudente?
La compra por parte de ČNB de 51.732 acciones de Coinbase, según consta en un informe trimestral, es más que un movimiento simbólico. Coinbase es la única empresa puramente relacionada con las criptomonedas dentro del índice S&P 500, que funciona como puente entre los mercados tradicionales y el sector de las criptomonedas.
Al invertir en estas acciones, el banco está eligiendo un canal regulado y cotizado para involucrarse indirectamente en el cripto sin tener que comprar bitcoin directamente.
Según los analistas del mercado, se trata de un movimiento estratégico, a saber, una exposición indirecta con menos volatilidad que los criptoactivos directos.
ČNB posee actualmente más de $12.800 millones de dólares en acciones estadounidenses, según un informe. En este contexto, la inversión de $18 millones de dólares parece pequeña, pero la señal es clara. El banco central está explorando la criptoindustria, por ahora por las vías tradicionales.
¿Compras de bitcoin en el futuro?
La inversión sigue a declaraciones anteriores del banquero central Aleš Michl, que a principios de año expresó su interés por el bitcoin como activo de reserva. Aunque todavía no se ha confirmado ninguna compra oficial de bitcoin, Michl no descarta la opción.
Considera el bitcoin «un activo interesante sin correlación con los bonos» y atractivo para una cartera diversificada. Sin embargo, también destaca los riesgos: el bitcoin sigue siendo volátil y está especialmente indicado para inversores profesionales.
Aun así, la compra de esta importante bolsa de criptomonedas es vista por algunos analistas como un presagio de más cosas por venir. Aunque el ČNB aún no posee bitcoin directamente, ya tiene bitcoin indirectamente en su cartera con acciones en Coinbase y Tesla.
Este movimiento del banco central checo demuestra que incluso las instituciones tradicionales ya no pueden ignorar las criptomonedas. Aunque por ahora sigue siendo sólo una exposición indirecta a través de Coinbase, abre la puerta a una mayor participación en el cripto mercado. Y ese es un paso importante tanto para el banco como para las monedas digitales.
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