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Una mujer de Nueva Zelanda está acusada de robar dinero a su madre para invertirlo en criptomonedas. Después de esto, presuntamente mató a su madre de casi 80 años.
Problemas financieros
La ex-profesora Julia DeLuney, de 53 años, llevaba un año invirtiendo, entre otras cosas, en Bitcoin, según el New Zealand Herald, mientras tenía problemas financieros. El análisis de sus registros bancarios mostró que no podría pagar sus facturas sin que se depositaran en sus cuentas decenas de miles de dólares en efectivo, según el Ministerio de Justicia.
Su madre, Helen Gregory, había informado a unos amigos de que habían desaparecido grandes sumas de dinero, entre ellas una de $85.000 dólares neozelandeses (unos 45.000 euros). En total, Julia habría robado más de $90.000 dólares a su madre, dinero que luego envió a plataformas de criptomonedas. Julia lo admitió más tarde.
Una amiga de Helen Gregory declaró que la madre le había confiado que había escondido dinero en alguna parte, y que sólo su hija Julia sabía dónde estaba. Gregory estaba furiosa con su hija por haber cogido el dinero sin permiso e invertirlo en criptomoneda. Sin embargo, Julia supuestamente tranquilizó a su madre, prometiéndole que el dinero estaba seguro y que no tenía por qué preocuparse.
Análisis judicial
Examinando las cuentas bancarias de su hija, el contable forense Eric Huang consiguió averiguar que DeLuney había transferido unos $95.000 dólares de su banco a plataformas de comercio de criptomonedas entre enero de 2023 y enero de 2024. De esta cantidad, sólo regresaron $52.000 dólares. Sus ingresos consistían principalmente en retiradas de criptomonedas de estos exchanges.
Durante meses, DeLuney no tuvo ingresos suficientes para financiar su estilo de vida sin estas retiradas, según el análisis de Huang, que testificó ante el tribunal. Admitió que no pudo averiguar cómo les fue a las criptoinversiones.
Acusación: asesinato
La acusación contra DeLuney es de asesinato en un juicio celebrado contra ella en Wellington. Según el Ministerio de Justicia, DeLuney mató a su madre y luego hizo creer que se había caído del ático de su casa el 24 de enero de 2024, cerca de Wellington.
Sus abogados afirman que la policía sufría de visión de túnel y que su atención se centraba únicamente en ella. Afirman que DeLuney había ido a buscar ayuda para su madre tras caerse del ático, después de lo cual otra persona entró y la mató.