Foto: Chinnapong/Shutterstock
El precio de Bitcoin puede estar a punto de experimentar una fuerte subida. Los analistas de Stockmoney Lizards hablan de una señal de compra notablemente clara que no hemos visto desde mediados de 2024.
Según ellos, Bitcoin podría subir hasta los $200.000 en 2025, con un posible repunte hasta los $250.000. El mercado parece estar preparándose para una nueva fase.
Un patrón histórico de Bitcoin se repite
La señal procede del Optimised Trend Tracker (OTT), una herramienta que predijo correctamente anteriores movimientos importantes del precio de Bitcoin.
El Optimised Trend Tracker es un indicador que ayuda a los operadores a reconocer una tendencia existente o, en otras palabras, a determinar en qué lado de la tendencia actual nos encontramos. Cuando el precio está por encima del OTT, nos encontramos en una tendencia alcista. Si el precio está por debajo del OTT, estamos bajo la influencia de una tendencia bajista.
La OTT sigue la evolución de los precios mediante medias móviles y medidas de volatilidad. En el pasado, cada vez que el precio superaba las bandas OTT se producía una sólida subida. Según Stockmoney Lizards, ese momento ha llegado de nuevo. ‘Ya estamos aquí’, escriben en la red social X. Con ello se refieren a los anteriores avances de 2016 y 2020, ambos precedidos de enormes subidas de la cotización.
Optimismo pese al estancamiento temporal del precio del bitcoin
Aunque el precio ronda actualmente los $106.000, los analistas siguen siendo optimistas. A pesar de las incertidumbres macroeconómicas y las señales contradictorias de la conferencia Bitcoin 2025, muchos investigadores de mercado esperan una cotización de al menos $120.000 a $130.000 en un futuro próximo. Entre las noticias sobre Bitcoin se encuentran, tanto opiniones optimistas como críticas, de la conferencia.
Según la empresa de análisis en cadena Glassnode, $120.000 podría incluso convertirse en un punto de giro clave. En su boletín semanal, sostienen que en ese nivel es probable que aumente la presión vendedora. Esto podría significar que los inversores querrán recoger beneficios tras una subida prolongada, lo que podría ejercer una presión negativa temporal sobre el precio.
La cautela sigue siendo necesaria
Sin embargo, no todo el mundo está entusiasmado. El año pasado, Bitcoin cayó un 30% tras la misma conferencia. Algunos operadores se preguntan si la «memoria del mercado» podría provocar una reacción similar también esta vez. Por eso es importante mantener unas expectativas realistas. Después de todo, el mercado sigue siendo voluble y susceptible a influencias externas.
Aunque actualmente hay pocos indicios de una caída inmediata de los precios, el miedo y la codicia son simplemente los principales motores del mercado de criptomonedas. La ausencia de sorpresas macroeconómicas negativas, así como el creciente interés institucional, proporcionan una base sólida. También influye el hecho de que muchos inversores a largo plazo siguen conservando sus monedas.
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